Módulo 1: Guía pedagógica. Las raíces de la paz, el conflicto y la violencia
Módulo 2: Convivencia, justicias y transformación de conflictos comunitarios
Módulo 3: Convivencia y transformación de conflictos con enfoque de género
MÓDULO 4: CONSTRUYENDO PAZ CON RAÍCES TERRITORIALES E INTERCULTURALES

Herramientas Conceptuales – Justicia para la paz y convivencia comunitaria

Introducción conceptual

Las estrategias para la prevención de la violencia y las formas no violentas resolución de conflictos que hemos visto en este módulo no podrán contribuir a la convivencia comunitaria de manera sostenible si actúan por sí aisladamente o de manera dispersa.

Una de esas bases culturales refiere a las formas en que, como comunidad, concebimos la aplicación de la justicia, es decir, al tratamiento que le damos a quienes han ejercido la violencia y a las exigencias de reparación que hacemos por los daños causados.

Desafortunadamente, en contextos donde grupos armados o fuerzas autoritarias han impuesto a la comunidad normas de comportamiento y sanción, muchas veces se confunde la justicia con el ajusticiamiento. Este último refiere a la aplicación de una pena última y arbitraria, sin derecho a un procedimiento imparcial o digno, y que suele terminar en la expulsión o la eliminación del perpetrador de la comunidad. Lo que es peor, esta forma de impartir «justicia» se tiende a normalizar y, de repente, escuchamos a los mismos miembros de la comunidad reclamando «mano dura» y trayendo a agentes externos que poco a poco deterioran las bases de la confianza y la convivencia que tanto han costado construir.

Muchas veces limitamos nuestro entendimiento de «justicia» a la aplicación de un castigo. Esta noción de «justicia» es lo que algunos llaman el paradigma punitivo de la justicia. Algunas autoridades y gobernantes aplican esa forma sumamente limitada de ver la justicia para ganar el favor popular, dando la impresión de que están haciendo algo al repartir castigos y penas por doquier sin resolver las raíces del problema, ese extremo le podemos llamar el «populismo punitivo».

El populismo punitivo no sólo lleva a un desaprovechamiento de tiempo y de recursos, sino también a la generación de violencia y miedo y a la perpetuación de los problemas. Las disputas no dejarán de aparecen hasta que las afrontemos en su raíz, reconstruyamos la confianza social y resolvamos el conflicto social.

Desterrar la cultura del castigo violento y, en especial, de responder a la violencia con más violencia, pasa por reconcebir la idea de justicia para la convivencia. Justicia no equivale a venganza, tampoco solo al castigo o sanción. Existen formas alternativas en que una comunidad puede concebir la justicia para enfrentar la violencia (Uprimny and Sa!on 2005).

A continuación, exponemos tres versiones comparando el paradigma punitivo (también conocido como retributivo) con alternativas como la justicia restaurativa y la justicia comunitaria:

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¡Pon a prueba tu conocimiento!

En el siguiente párrafo debes arrastrar y colocar las palabras exactas para completar la frase correcta: