Módulo 1: Guía pedagógica. Las raíces de la paz, el conflicto y la violencia
Módulo 2: Convivencia, justicias y transformación de conflictos comunitarios
Módulo 3: Convivencia y transformación de conflictos con enfoque de género
MÓDULO 4: CONSTRUYENDO PAZ CON RAÍCES TERRITORIALES E INTERCULTURALES

Herramientas conceptuales

En la constitución de Colombia se establece que nadie podrá ser discriminado por motivos de raza, color de piel, u origen étnico. Igualmente, la constitución consagra algunos derechos especiales a los grupos étnicos indígenas, afrodescendientes, raizales, y palenqueros, con el objetivo de reconocer y proteger la diversidad étnico-cultural del país.

Esto no surgió de la nada. Es una respuesta a una historia que se suele olvidar y de la que aún hoy vivimos sus consecuencias.

Escucha el audio a continuación: 

Analizando las raíces étnico-raciales de la violencia: racismo directo, estructural y cultural

Aunque para algunos suene extraño es importante tener claro que las divisiones raciales entre seres humanos no son un hecho biológico sino una construcción social.

Las distinciones raciales han sido una construcción de las sociedades coloniales para clasificar y distinguir entre personas y grupos poblacionales a partir de características físicas, pero en realidad no hay nada inherentemente natural o predeterminado en una persona por el color de su piel.

La idea de que podemos establecer diferencias entre seres humanos a partir de clasificaciones raciales, porque ellas determinan una condición biológica o genética, no tiene ningún sustento.

Algunas personas piensan que debido a que en Colombia la discriminación racial no siempre se manifiesta como lo vemos en las películas históricas u otros lugares en el mundo, con agresiones violentas y de odio racial explícito, entonces aquí no hay discriminación racial.

Desafortunadamente, no es así, pues todavía hoy el lugar en que naces, tú extracción cultural, o tu raza, hacen una diferencia en el tipo de vida que llevas, en las oportunidades que tienes, y en cómo eres visto por otras personas.

Este es un país con una enorme diversidad debido a que su población se ha constituido a partir de una variedad de tradiciones y mezclas étnicas y culturales provenientes de su historia desde tiempos coloniales. Esa diversidad, sin embargo, no ha estado exenta de discriminaciones hacia grupos poblacionales a partir de etiquetas raciales o por su origen étnico-cultural, precisamente como herencia de esa historia colonial.

La construcción histórica del racismo en la cultura y su institucionalización

En la medida que nuestra sociedad ha sido construida a partir de estratificaciones y socializaciones establecidas históricamente a partir de distinciones étnico-raciales, donde algunos patrones y rasgos culturales han ocupado un lugar central y otras un lugar marginal, estas distinciones tienen un efecto que heredamos hasta el día de hoy.

Durante la colonia las estratificaciones raciales se usaron para justificar las disparidades de poder y estatus a través de la definición de la superioridad de algunas razas y la inferioridad de otras. Tales distinciones se recrearon comúnmente a través de estereotipos impuestos sobre los pueblos indígenas y afrodescendientes por parte de élites españolas y criollas.

Esto quiere decir que construcciones raciales han sido usadas para justificar la exclusión, la discriminación, la desigualdad, y la violencia a través de la historia del país.

Por eso, cuando hablamos de racismo, desde este punto de vista, no nos estamos refiriendo solamente a la agresión y discriminación racista directa y abierta (ver infografía), basada en prejuicios contra personas de una determinada raza.

El racismo es, a su vez, un sistema de socialización cultural en el cual ciertos modelos culturales son más valorados, mientras otras poblaciones y su bagaje cultural son desestimadas o menospreciadas por cuenta de sus rasgos raciales o étnicos.

Esto es lo que llamaríamos (ver infografía) racismo cultural, y que llega a ser internalizado profundamente por todos en la sociedad, tanto por quienes lo sufren como quienes se sienten superiores gracias a estas formas de socialización en la familia, la escuela, los medios de comunicación, o la sociedad.

En la medida en que estas construcciones culturales de superioridad e inferioridad se sostienen en el tiempo y adquieren raíces históricas, llegan a constituirse en todo un sistema de exclusión y discriminación, lo que llamamos un racismo estructural (ver infografía), donde las formas en que está organizada una sociedad hace que ciertos grupos de población se vean limitados en sus posibilidades y oportunidades.

En el siguiente podcast aprenderemos más acerca del concepto de racismo:

Por muchos años poblaciones indígenas y afrodescendientes no tuvieron derecho a tener representación política, sufrían explotación laboral, la educación no prestaba atención a sus particularidades culturales (por ejemplo, se les obligaba a hablar en español o negar sus tradiciones culturales). A partir de esas herencias históricas, las oportunidades que tienen las personas de ese grupo el acceso al empleo, la educación, la vivienda, la alimentación, la atención médica, y la seguridad, tienden a darse en condiciones desiguales al resto de la población, simplemente como legado de las discriminaciones hacia un grupo por su etiqueta racial u origen étnico. por cuenta de sus rasgos raciales o étnicos.

En la medida que estos comportamientos e instituciones racistas hacen daño a las personas y afectan poblaciones concretas, constituyen formas de violencia directa e indirecta, tanto cultural como estructural. Como puedes ver en la infografía al inicio de este módulo y en el gráfico a continuación, los actos y agresiones racistas, y el sufrimiento de la violencia y la violación de derechos de manera desproporcionada, son la manifestación más visible del racismo. Sin embargo, al igual que hemos visto con otras formas de violencia, las discriminaciones raciales también tienen sus raíces en lugares menos visibles, en formas de racismo cultural y de racismo estructural o sistémico.

¡Pon a prueba tu conocimiento!

Es el momento de evaluar y poner a prueba tu conocimiento. Lee el siguiente enunciado y selecciona la respuesta que consideres correcta.

No importa el color de tu piel?  Contrarrestar el racismo para construir paz

Para todo aquel que crea en la igualdad y la dignidad inherente a todo ser humano, por supuesto es difícil entender que la sociedad tenga estos patrones de discriminación racial o de exclusión racista, y quisiéramos que no fuera así.

Sin embargo, debemos tener cuidado de no confundir un «deseo» o un «deber ser» con lo que constituye la realidad.  Ciertamente no debería distinguirse entre personas ni discriminarlas por su color de piel o su origen étnico. Si bien la raza es una construcción social, no podemos olvidar que hacemos parte de una sociedad que sí ha usado las distinciones raciales para clasificar grupos humanos y construir instituciones sociales.

En nuestro país existen dos poblaciones que han sufrido de manera desproporcionada las consecuencias del racismo y las exclusiones y desigualdades étnicas: las comunidades indígenas y las comunidades negras afrodescendientes.

El hecho de que todos los días veamos noticias y nos parezca normal la violencia contra las comunidades indígenas, negras y afrodescendientes, la violación sistemática de sus derechos, las condiciones precarias en sus territorios, el maltrato y abandono por parte del estado, la corrupción extendida, y las condiciones difíciles de vida que tienen que soportar, son muestras de un sistema injusto e instalado en la sociedad del que todos nos debemos hacer responsables por transformar.

Asumir la posición de no querer ver cómo el racismo existe en la sociedad puede llevar a invisibilizar las formas en que existen estas exclusiones y violencias raciales. Esto solo contribuye a perpetuarlas porque evitan que hagamos algo para cambiarlas.

No debemos asumir que la igualdad ya está en la realidad. Precisamente porque aún falta mucho camino por recorrer debemos luchar para que la igualdad y la diversidad sean una realidad.

Para ello, en este módulo trabajaremos actividades que nos sirvan para visibilizar estas exclusiones y discriminaciones raciales, veremos formas de luchar para contrarrestarlas, y exploraremos horizontes de organización social y comunitaria que buscan transformar estas desigualdades.