Muchas veces se entiende la paz simplemente como traer presencia de instituciones del Estado e inversión de intereses privados a lugares que han sido afectados por la violencia.
Por supuesto que la inversión es necesaria, pero en estas visiones de la paz y el desarrollo, no se toma en cuenta las perspectivas de quienes han sufrido la violencia. Los pobladores mismos son quienes mejor comprenden qué necesitan ellos y sus territorios para iniciar un sendero hacia la paz.
Esto quiere decir que cada comunidad y sus participantes emprenden la tarea de «leer sus territorios», desde sus propias formas de entenderlo y las tradiciones a través de las cuales se han constituido como comunidad.
La paz territorial con enfoque étnico e intercultural no puede verse como un capítulo añadido a un conjunto de propuestas hechas en algún centro de poder político.
No se trata de que las poblaciones se ajusten, sean asimiladas, o integradas a unas propuestas hechas por una sociedad mayor o dominante que hace concesiones a quienes son considerados como la periferia del conocimiento y las necesidades del país.
El enfoque étnico e intercultural considera que las visiones desde los territorios deben ser parte integral y transversal de la construcción de paz, su columna vertebral.
Desde allí, busca crear poderes locales alternativos y señalar la necesidad de que toda la sociedad asuma la responsabilidad de cambiar las estructuras, instituciones y relaciones que en su conjunto han perpetuado la violencia y el conflicto armado.
No se trata, por tanto, de enviar ayudas a los menos favorecidos y vulnerables, no es hacer políticas asistencialistas del centro para la periferia. Una visión intercultural involucra el compromiso y responsabilidad de todas las poblaciones y territorios del país en crear acciones que busquen el cambio en todos sus niveles y relaciones de poder:
Para un visión intercultural y territorial de la paz y el desarrollo, es en el encuentro y diálogo intercultural, entre estas visiones diversas, que se construye visiones compartidas de los conflictos y de las oportunidades para transformarlo.
Aún más importante, los horizontes de paz intercultural se enfocan en descubrir y proponer otros mundos posibles, propuestas alternativas a los modelos dominantes de desarrollo, que emerjan del encuentro e intercambio de visiones sobre el territorio, la cultural, la identidad, los conflictos, y la convivencia.
¡Pon a prueba tu conocimiento!
Es el momento de evaluar y poner a prueba tu conocimiento. Lee el enunciado a continuación y selecciona la respuesta que consideres correcta.